EL REFRENTON

      Rozamos casi el pleno de integrantes del club en este sábado primero del recientemente estrenado otoño, debidamente uniformados y abrigados ya que éste se ha presentado con las temperaturas propias de esta estación.   Ocho fuimos los chinches que salimos en esta ocasión y puntualmente iniciamos nuestra ruta,  marcada en el día anterior por nuestro tesorero.

     Iniciamos nuestro rodar por los diversos caminos que nos llevan por el paraje de la Estrella hasta llegar a la pedanía de Ballesteros para continuar hasta Villar de Olalla, continuado posteriormente por el camino que nos conduce hacia la cantera de esta población, parada obligada para inmortalizar el grupo en el día de hoy.

      Pronto nos encontramos al reanudar nuestra andadura que a la casi abandonada pista que solemos transitar cada vez que nos acercamos por estos parajes ha sido ensanchada creemos con la intención de realizar alguna corta de leña, ya después de alguna que otra bajada y subida junto con algunos pequeños despistes y salidas del track marcado por el gps de nuestro sherpa hoy, con pequeñas "Morasendas" y apenas visibles "Moracaminos" salimos cerca de la localidad de Valdeganga.

     Tras rodar apenas unos metros por la carretera volvimos a adentrarnos por las pistas que ya conocíamos y que nos conduce a los pies de la tachuela del día "El Refrentón", duras rampas con unas mas que exigentes pendientes y que nos llevaron a alcanzar casi a los 1100 metros de altitud, en la cima de este puerto llevamos a cabo la reagrupación del grupo y la reposición de fuerzas con la ingesta de las barritas habituales.

    Tocaba entonces emprender el camino de regreso a nuestro lugar de partida y para ello optamos por hacerlo por el camino mas corto que es el que no lleva a la pedanía de Olmedilla de Arcas.

     Cambiamos nuevamente el itinerario a seguir y en vez de realizar la vuelta por Arcas, que es como solemos hacerlo, decidimos el llevarlo a cabo por el camino mas recto, que no es otro que el de continuar por la pista hasta Ballesteros nuevamente, retornando por los caminos de labor por donde habíamos rodado por la mañana.

     El final de ruta lo pusimos tras unos 53 kms. y unos 890 metros de ascenso acumulado en esta mas que exigente ruta en el bar "El Frenazo", disfrutando del solecito y unos ricos tercios.